Las protestas en Curanilahue por el fallo judicial que ordena el desalojo de más de 1.000 familias asentadas en las tomas del sector La Colcha continúan intensificándose. Luego de los cortes de ruta realizados la semana pasada, un grupo de vecinos instaló carpas en el frontis de la municipalidad, exigiendo apoyo por parte de las autoridades locales y una mesa de diálogo con la empresa Forestal Arauco, propietaria del terreno en disputa.
La protesta surge tras la falta de respuestas a la solicitud de negociación presentada por los pobladores, quienes buscan una solución habitacional. Lorena Garrido, una de las dirigentas del movimiento, señaló que la manifestación busca visibilizar la situación de las familias afectadas.
“Estamos mostrando la realidad de lo que llegaría a pasar si se concreta el desalojo. Queremos mayor compromiso y sensibilizar a la empresa Arauco para que entienda que detrás de todo esto hay una necesidad de vivienda”, afirmó.
Asimismo, la dirigenta reconoció que algunas personas se han aprovechado de la situación, pero aseguró que su caso y el de muchas familias es legítimo.
“Tenemos la esperanza de que lleguemos a un acuerdo”, agregó.
Hasta el momento, ni la Municipalidad de Curanilahue ni Forestal Arauco han emitido declaraciones respecto a la posibilidad de iniciar un diálogo con los dirigentes. En tanto, los vecinos advierten que las movilizaciones continuarán, mientras la incertidumbre sobre el desalojo se mantiene y todo apunta a que su ejecución es inminente.